¡Hola queridos amigos! Comienza un nuevo día y me encuentro casi desbordado por la gran aceptación que he recibido por vuestra parte a la hora de seguirme en mis nuevas redes sociales.

Cierto es que algunas personas se han mostrado reticentes, pero hay que entenderlo y ponerse en su lugar, es lo más normal del mundo, a casi nadie le gustan los cambios y mucho menos cuando se está agusto en el lugar que uno se encuentra. Pese a ello, espero seguir en contacto de alguna manera.

Sea como sea, estoy más que satisfecho, contento, feliz… de seguir contando con muchos de vosotros a mi lado, sin vuestra compañía esta nueva aventura no tendría sentido alguno. No tengo suficientes palabras para agradecer todo vuestro apoyo y, por qué no decirlo, vuestra rápida determinación para comenzar una nueva andadura con rumbo a continuar el camino que ya habíamos comenzado.

¿POR QUÉ TAN AGRADECIDO?

Seguid leyendo… hoy os compartiré un poquito más de mí que quizás muchos no conozcáis…

En este segundo pasito del camino me vienen a la mente tiempos pasados en los que, por motivos personales, abandoné temporalmente las redes sociales y todo tipo de actividad en internet. Incluso me deshice de todos los equipos informáticos que tenía en casa. Tuve una fuerte crisis personal, hay quien lo llama «la crisis de los 30», pero lo cierto es que me costó bastante salir de ese pozo que no parecía tener fin…

Durante ese tiempo mi familia fue quien me ayudó a salir adelante, pero el destino me tenía preparada una grata sorpresa y una gran lección al comprar un nuevo pc y volver al ciberespacio… había recibido innumerables mensajes de personas mostrándome su cariño, animándome y deseando mi pronto regreso a la actividad. Este hecho resultó un fuerte revulsivo en mi estado anímico, ya bastante recuperado, que me hizo volver con más fuerza si cabe a creer en lo que hago y para quienes lo hago.

MORALEJA

De todo esto saqué una clara lectura. A veces pensamos que estamos solos y hay muchas personas que nos esperan, que piensan en nosotros sin ser conscientes de ello. También este hecho, para mi, contribuyó a romper el mito de que internet es un medio «frío». Pese a que hay quienes se esfuerzan en deshumanizarlo o restarle importancia, no olvidemos nunca que internet está hecho por y para las personas y detrás de cada pc hay alguien poniendo un pedacito de sí mismo en cada letra. Así mismo decidí que no tengo prisa en caminar solo para llegar a ninguna parte, si no más bien caminar acompañado y dar lo mejor de mí para, todos juntos, llegar lo más lejos posible.

Espero no os haya resultado demasiado densa la lectura de hoy, pero solo así entiendo que podía expresar lo que verdaderamente siento en este momento al verme arropado de nuevo por todos vosotros. ¡Muchas gracias!